Luego de terminada la temporada en las aguas continentales de la Patagonia Chilena quisiéramos compartir un resumen de lo que nos dejó. Sin lugar a duda, la Patagonia fue muy generosa con nosotros, disfrutamos de la compañía de excelentes personas, los guiamos por innumerables aguas, compartimos experiencias, enseñamos y aprendimos, la naturaleza virgen nos cautivó con su belleza y pudimos ofrecer hermosas performance de pesca a lo largo de la temporada.
Cubrimos una superficie de más de 48.500 km² con nuestros programas pudiendo adaptarnos a los requerimientos de los pescadores. Los alojamientos cumplieron con todo y cada requisito; la cocina, camas y baños sacaron aplausos y cuando algunos aventureros nos pidieron acampar desplegamos una completa logística. Pescamos con diferentes técnicas y en diversos lugares como el Río Futaleufú, lago y río Yelcho, Río Palena, Lago Espolón, Lago Las Rosas, Lago Noroeste, Río Malito, Río Petrohué, Río Maullin, Río Puelo y varias lagunas.
Personalmente disfruto mucho guiar y flotar los ríos siendo uno de mis preferidos el Futaleufú. Varios de nuestros clientes opinan que este río es la mescla perfecta entre flotar y vadear. Por ello aprovecharon al máximo 3 grandes secciones las cuales tienen un entorno que va cambiando constantemente generando una estructura “clase A” para la pesca. Hicimos de todo, a comienzos de cada día recomendábamos tener 2 equipos listos, es que es verdad: La estructura cambia y las estrategias de pesca también. La idea era empezar con streamers tipo zonkers, woolly bugger, leech y articuladas, usando líneas de hundimiento entre 150 a 250 grains (gr) con leader o tippet cortos y cañas N°5, 6 y 7. Cuando entrabamos a zonas de sight fishing cambiábamos rápidamente a mosca seca con cañas de números similares usando patrones de adams, caddis, hormigas y saltamontes. Las truchas arcoíris, si bien eran selectivas, con un buen cast no podían resistirse a nuestras moscas secas que jugaban en la superficie del agua, en cambio las marrones atacaban ferozmente las streamers. El río también tiene especies migratorias que recorren sus aguas como el King Salmon donde se requiere un equipo más pesado. También se pueden pescar en ciertos tramos Fontinalis o Trucha de Arroyo.
El Lago Yelcho es uno de esos lugares que cada pescador con mosca debería tener la oportunidad de pescarlo por lo menos una vez en su vida. El momento de la eclosión de matapiojos (dragon flies) es un espectáculo generando gran actividad en el comportamiento de las truchas. Pescamos gran parte del tiempo presentando imitaciones de matapiojo, Chernobyl, Fat Albert, entre otras moscas desde el bote a las orillas llenas de juncos y troncos como también de grandes acantilados de piedras. Las líneas de comidas son enormes y muy bien marcadas, en ellas los pescadores se lucieron con líneas floating o de hundimiento. Esta última con muy buenos resultados usando imitaciones de alevines. Otra alternativa fue pescar desde hermosas playas que en días soleados se asemejaban más al caribe que a la zona austral de Chile. Aquí predominaron los streamers con líneas de hundimiento sobre 250 gr ya que gran parte de las orillas tienen un pronunciado quiebre en el fondo. No faltaron los abrazos espontáneos entre guía y pescador luego del realese de alguna trucha ya que este es un lago que sorprende por el tamaño y agresividad de sus arcoíris y marrones. También se pueden ver enormes Kings en el desagüe del Río Futaleufú al Lago Yelcho y siempre hubo alguna Fontinali que nos sorprendió.
Otro lugar que recorrimos bastante fue el Río Maullin ubicado algo más al norte. He escuchado bastantes veces que es un río técnico para la pesca con mosca, lo cual es cierto. Esto lo vivimos cuando hermosas truchas luego de un fuerte strike se dirigían directamente a algún tronco enredando el tippet y cortándolo posteriormente…hay que estar atento pero por otro lado luego de este último año soy un convencido de que es un muy buen lugar para los que se están iniciando en este deporte-arte. Varios de los pescadores que llevamos al río era la primera vez que pescaban con mosca, tenían poca experiencia o nunca habían podido sacar alguna trucha. Prácticamente la totalidad de la pesca fue en bote ya que la estructura de las orillas si bien son ideales para el refugio y zonas de alimentación de las truchas por su abundante vegetación, no permiten vadear con facilidad. El Maullín nos regaló una de las truchas marrones (fario) más lindas de la temporada como también de días de numerosas capturas. Las truchas arcoíris y marrones abundan, también se puede hacer buena pesca de salmones salares y es cada vez más frecuente ver en ciertos tramos del río runs de Jacks. Pescamos principalmente con streamers como wooly bugger, imitaciones de pancoras y camarones, leach, zonker, articuladas y alguna que otra matuka.
Usamos líneas de hundimiento hasta 300 gr dependiendo del nivel de agua del río con una extensión corta de tippet. Los números de cañas más utilizados fueron 5 y 6.
Luego de la erupción del Volcán Calbuco, la tonalidad algo más turbia de las aguas del Río Petrohué fue una constante durante la temporada y aunque los runs de salmones se han puesto algo más impredecibles con la poca lluvia de los últimos años esto no afectó la performance de pesca y una de las cosas más satisfactoria que nos toca ver como guías: La cara del pescador cuando saca el primer Chinook del día “sonrisa de oreja a oreja”. No puede ser de otra manera ya que los King son una locomotora en el agua y su pesca antes de algún strike es de paciencia y a veces algo monótono por lo que tener uno en sus brazos es pura satisfacción. Para el Chinook siempre recomendamos equipos desde N°8 hacia arriba, líneas de hundimiento y clásicos patrones de moscas para salmón. Por otro lado, la pesca de truchas fue muy buena. Para ello generalmente usamos equipos N°5 y 6 con líneas floating o de hundimiento. Dependiendo del tiempo y estructura usamos streamers, moscas secas, ninfas y huevos (estas 2 últimas con indicadores).
Cosa aparte fue el frenesí que provoca el desove de los salmones dando vida al lugar, maravillándonos y provocando que más de un pescador nos pidiera subir los afluentes del Río Petrohué solamente para ver el baile nupcial de una pareja de kings y registrarlo en su cámara.
La pesca fue mucho más pero quisimos compartir 4 lugares emblemáticos de nuestras dos zonas de trabajo (Puerto Varas y Futaleufú Yelcho). Espero que este artículo sea un buen recuerdo para los pescadores que nos visitaron y sea inspirador para los que aún no nos conoce.
Somos Matapiojo Anglers y les deseamos un paciente receso de temporada y la mejor pesca para la próxima.